domingo, 29 de julio de 2012

En una noche contigo y sin ti...

Cargando esa melancolía de borracho
en un puño erguido, sin fuerzas, sin ganas
en un ahogo prohibido de salvación
comienzas a cerrar los ojos, sigues viendo
palpitas de tanto esperar, sin respuesta a tus ruegos
en un momento la desolación ha tocado tu puerta
no quieres abrir
pero allí espera, paciente y consciente
sin prisa
Vamos cayendo en tu percepción infinita del desencuentro
olvidando porqué estás allí 
ha qué has venido!
y ella espera, sabiendo que en algún momento la verás
No ocurre
sigues melancólico y borracho
pero nada es real
todo es una simple tregua de la vida
que tú no quieres conceder